¿Hay algo mejor que el aroma de pan recién horneado llenando tu hogar? Imagina la satisfacción de preparar tus propios panes deliciosos en poco tiempo y con poca levadura. Sí, has leído bien, en tan solo 45 minutos puedes disfrutar de panes esponjosos y llenos de sabor.
Con esta receta, te aseguro que no necesitas ser un experto panadero para lograr resultados espectaculares. Desde la primera vez que los pruebes, te enamorarás de la facilidad y el sabor irresistible de estos panes. Así que ¿por qué esperar más? ¡Vamos a hornear!
Cómo preparar Pan casero saborizado en poco tiempo
Para preparar este delicioso pan, vas a necesitar:
Ingredientes:
Para la masa:
- 200 ml de leche tibia
- 1 cucharada de azúcar
- 7 g de levadura seca
- 1 cucharadita de sal
- 2 claras de huevo
- 70 ml de aceite
- 80 g de yogur natural
- 550 gramos de harina
- 60 g de manteca blanda
Para el relleno:
- 500 g de queso rallado
- ½ cucharadita de sal
- 1/3 manojo de perejil picado
- 1/3 manojo de eneldo picado
Preparación:
- Comencemos preparando la masa. En un tazón grande, mezcla la leche tibia con el azúcar y la levadura seca. Deja reposar durante unos 10 a 15 minutos hasta que la levadura se active y comience a espumar.
- Una vez que la levadura esté activa, agrega la sal, las claras de huevo, el aceite y el yogur natural. Mezcla bien todos los ingredientes.
- Incorpora gradualmente la harina, amasando con las manos o utilizando una batidora con gancho para amasar, hasta obtener una masa suave y elástica.
- Agrega la manteca blanda a la masa y continúa amasando hasta que esté completamente incorporada. La masa debería volverse ligeramente pegajosa.
- Cubre el tazón con un paño limpio y deja que la masa repose y suba en un lugar cálido durante unos 20 minutos.
- Mientras tanto, prepara el relleno mezclando el queso rallado con la sal, el perejil picado y el eneldo picado en un tazón pequeño.
Armado y horneado
- Pasado el tiempo de reposo de la masa, divídela en porciones del tamaño de una pelota de golf. Haz un agujero en el centro de cada porción y rellénalo con una cucharada de la mezcla de queso.
- Forma cada porción en una bolita, asegurándote de que el relleno esté completamente sellado dentro de la masa.
- Coloca las bolas de masa rellenas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, dejando espacio entre ellas para que puedan expandirse.
- Precalienta el horno a 180°C (350°F).
- Hornea los panes en el horno precalentado durante unos 20-25 minutos, o hasta que estén dorados y suenen huecos al golpear la parte inferior.
- Una vez listos, retira los panes del horno y déjalos enfriar ligeramente antes de servir.
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¡Y ahí lo tienes! En solo 45 minutos, puedes disfrutar de estos panes deliciosos y esponjosos que seguro serán un éxito en tu hogar. Disfrútalos recién horneados con mantequilla, acompañando tus comidas favoritas o simplemente como un bocadillo irresistible.
