Los ravioles caseros son una delicia tradicional que deleita a cualquiera que los pruebe. En esta receta, aprenderás a preparar ravioles rellenos con una mezcla sabrosa de jamón, queso y ricotta.
Desde la elaboración de la masa hasta el relleno y la cocción, te guiaremos paso a paso para que puedas disfrutar de unos ravioles caseros frescos y deliciosos.
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Ingredientes
- 300 gramos de harina de trigo
- 3 huevos grandes
- 200 gramos de jamón (cortado en pequeñas piezas)
- 500 gramos de ricotta
- 70 gramos de queso parmesano (rallado)
- Sal y pimienta al gusto
- Agua (para sellar los ravioles)
- Pizca de harina (para espolvorear)
- Agua hervida con una pizca de sal (para cocinar los ravioles)
Preparación
- En un bowl grande, forma una corona con la harina y agrega los huevos batidos suavemente en el centro.
- Mezcla gradualmente la harina con los huevos hasta formar una masa uniforme.
- Amasa la masa durante aproximadamente 10 minutos hasta que esté suave y uniforme. Si la masa se vuelve pegajosa, agrega un poco más de harina y continúa amasando.
- Cubre la masa con película plástica y déjala reposar durante 20 minutos.
Preparación del Relleno
- En un tazón, mezcla el jamón cortado en pequeñas piezas, la ricotta y el queso parmesano rallado.
- Condimenta la mezcla con sal y pimienta al gusto y reserva.
Armado de los Ravioles
- Espolvorea un poco de harina sobre una superficie limpia y estira la masa poco a poco con un palo hasta que esté lo suficientemente delgada.
- Enrolla la masa en el palo y presiona hacia los bordes.
- Dobla la masa para determinar el ancho de los ravioles.
- Toma una porción del relleno y disponlo en la masa con un separador.
- Moja los bordes con agua y dobla la masa para cubrir el relleno.
- Presiona entre los rellenos para eliminar el aire y sella la masa con la palma de tu mano.
- Corta la masa a lo largo y entre los rellenos para formar los ravioles.
Cocción
- Hierve agua con una pizca de sal en una olla grande.
- Agrega los ravioles y cocina por unos minutos hasta que estén al dente.
- Retira los ravioles con una espumadera y sírvelos con tu salsa favorita.
Consejos
- Los ravioles caseros se pueden congelar antes de cocinarlos para disfrutarlos en otro momento. Colócalos en una bandeja enharinada y luego transfiérelos a bolsas para congelar.
- Asegúrate de sellar bien los ravioles para evitar que se abran durante la cocción.
- Experimenta con diferentes rellenos y salsas para crear tus propias variedades de ravioles caseros.
Acá te dejamos con el video de Cuk-it! por si necesitas una guía visual:
Con esta receta, podrás sorprender a tus amigos y familiares con unos ravioles caseros llenos de sabor y amor. Disfruta de la experiencia de hacer tu propia pasta fresca y deléitate con el resultado final. ¡Buen provecho!
