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Calabacines rebozados crujientes, muy sencillos de hacer

¿Buscas una manera fácil y deliciosa de disfrutar los calabacines? Los calabacines rebozados son una opción fantástica, su textura

Esta receta ofrece una combinación perfecta de calabacines tiernos por dentro y crujientes por fuera. Además, su preparación es bastante sencilla, lo que la convierte en una excelente opción para cualquier día de la semana.

Acompáñame mientras te guío a través de esta receta para crear unos calabacines rebozados irresistibles.

Índice

    Ingredientes

    • 1 Calabacín grande
    • 1 Huevo
    • 2 Tazas de pan rallado
    • 1/2 taza de Parmesano (rallado)
    • Sal a gusto
    • Pimienta negra a gusto

    Te invitamos a visualizar cada paso de esta receta muy tentadora:

    Preparación

    1. Para empezar, condimenta el huevo con sal y pimienta negra, y mezcla bien. Reserva.
    2. Sazona el pan rallado con sal y pimienta negra, y añade también el queso parmesano rallado. Mezcla y reserva.
    3. Corta el calabacín en rodajas finas, ya sea en rodajas redondas o a lo largo.
    4. Pasa cada rodaja por el huevo batido y luego por el pan rallado sazonado. Reserva.
    5. En una sartén, agrega la cantidad necesaria de aceite y cuando esté caliente, fríe cada rodaja de calabacín hasta que esté dorada.
    6. Asegúrate de que el aceite no esté demasiado caliente, para evitar que los calabacines se doren demasiado por fuera y queden crudos por dentro.
    7. Una vez dorados, colócalos en una rejilla o plato forrado con papel absorbente para que escurran el exceso de aceite.
    8. Sirve inmediatamente y ¡disfruta con tus seres queridos!

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    CONSEJOS:

    Selecciona calabacines frescos: Opta por calabacines firmes y frescos para obtener el mejor sabor y textura en tu plato final.

    Corta uniformemente: Intenta cortar las rodajas de calabacín con un grosor uniforme para que se cocinen de manera uniforme y obtengas una textura crujiente en cada bocado.

    Controla la temperatura del aceite: Asegúrate de que el aceite esté a la temperatura adecuada antes de freír los calabacines. Si el aceite está demasiado caliente, los calabacines se dorarán demasiado rápido por fuera y quedarán crudos por dentro.

    Escurre el exceso de grasa o aceite: Después de freír los calabacines, colócalos sobre papel toalla para que absorba el exceso de grasa y mantenga su textura crujiente.

    Sirve de inmediato: Los calabacines rebozados están más sabrosos cuando se sirven calientes y crujientes. Sírvelos tan pronto como estén listos para disfrutar de su mejor sabor y textura.

    ¡Espero que estos consejos te ayuden a preparar unos deliciosos calabacines rebozados crujientes!

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