Los panes de avena y queso son una opción deliciosa y saludable para el desayuno o la merienda. Son fáciles de preparar, no requieren harina refinada y tienen una textura esponjosa y un sabor intenso a queso.
Además, son versátiles, ya que puedes personalizarlos con diferentes especias y quesos para adaptarlos a tu gusto. En esta receta, te mostramos cómo hacerlos paso a paso, con ingredientes simples y consejos para mejorar su textura y sabor.
También, podrás visualizar cada paso de la receta mediante el siguiente vídeo del canal de Cocina casera:
Índice
Ingredientes
- 250 g de avena en hojuelas pequeñas
- 125 ml de agua a temperatura ambiente
- Especias al gusto (sal, ajo seco, hierbas secas)
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 250 g de queso cottage de pasta blanda (puede sustituirse por yogur, pero el sabor será mejor con el queso)
- Queso duro (opcional, al gusto, por ejemplo, Suluguni, 100 g recomendados)
Preparación
- Preparar la mezcla base:
- En un bowl grande, mezclar la avena con el agua a temperatura ambiente y remover suavemente.
- Agregar la sal, ajo seco y las hierbas secas de su elección.
- Añadir el polvo de hornear y mezclar bien.
- Incorporar el queso:
- Agregar el queso cottage y mezclar hasta obtener una masa homogénea.
- Si se desea, dividir la masa en dos partes y agregar queso duro rallado a una de ellas para una variante más sabrosa.
- Formar y hornear los panes:
- Formar aproximadamente 10 panes con la masa.
- Precalentar el horno a 180 °C.
- Colocar los panes en una bandeja para hornear forrada con papel de hornear.
- Hornear durante 35-40 minutos hasta que estén dorados y bien cocidos.
- Servir y disfrutar:
- Los panes son especialmente deliciosos cuando están calientes, pero incluso fríos mantienen su sabor y textura.
- Para recalentarlos, se pueden calentar en el microondas por unos segundos.
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Consejos adicionales:
- Aromas y sabores extra: Puedes añadir cebollino picado, romero o albahaca para un toque aromático adicional.
- Variante crujiente: Para una textura más crujiente, pincela los panes con un poco de aceite de oliva antes de hornearlos.
- Opción más esponjosa: Si prefieres panes más esponjosos, deja reposar la masa unos 10 minutos antes de formar los panecillos y hornearlos.
- Personaliza el queso: Prueba diferentes tipos de queso duro para variar los sabores, como parmesano o gouda.
- Añade semillas: Para un extra de nutrientes y textura, espolvorea semillas de sésamo, chía o lino sobre los panes antes de hornearlos.
- Sustituciones saludables: Si quieres una versión más proteica, puedes sustituir parte de la avena por harina de almendra o añadir una cucharada de proteína en polvo sin sabor.
Con estos consejos, ¡podrás disfrutar de unos panes de avena y queso irresistibles y llenos de sabor!