El crumble de berenjenas es una deliciosa y sencilla receta que combina la suavidad de esta versátil hortaliza con la textura crujiente y sabrosa de la cobertura de queso y mantequilla.
Con pocos ingredientes y un proceso fácil, puedes preparar un plato que sorprenderá a tus invitados o deleitará a tu familia en cualquier ocasión. ¡Aquí tienes la receta paso a paso!
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Ingredientes
- 4 berenjenas (o 3 grandes)
- 2 cebollas
- 150 gramos de queso rallado
- 120 gramos de mantequilla
- 100 gramos de harina
- 2 cucharadas de vinagre balsámico
- Aceite de oliva
- Sal
Preparación:
- Corta las berenjenas en cuadraditos pequeños y ponlas en remojo en agua con sal durante 30 minutos. Mientras tanto, corta las cebollas también en cuadraditos.
- En una sartén, calienta 6-8 cucharadas de aceite de oliva y rehoga la cebolla y la berenjena bien escurrida junto con el vinagre balsámico, sal y pimienta al gusto. Cocina hasta que estén tiernas.
- En un tazón aparte, mezcla el queso rallado con la harina. Agrega la mantequilla en trozos y desmenúzala con los dedos hasta obtener una mezcla granulosa y uniforme.
- Coloca la verdura escurrida en una fuente para horno y cubre uniformemente con la mezcla de queso y harina, formando una capa crujiente.
- Hornea a 180°C durante aproximadamente 30 minutos, o hasta que la corteza esté dorada y crujiente. Si ves que se dora demasiado rápido, baja un poco la temperatura del horno.
- ¡Saca del horno y sirve caliente! Este crumble de berenjenas es perfecto como acompañamiento o como plato principal, ¡disfrútalo en cualquier ocasión!
Con esta receta, podrás disfrutar de un crumble único y delicioso que combina la riqueza de las berenjenas con el sabor irresistible de la cobertura crujiente de queso y mantequilla. Sorprende a tus seres queridos con esta preparación fácil y llena de sabor.