Es una tradición popular y milenaria de los pueblos originarios de América, se trata de tomar caña con ruda cada primero de agosto con el fin de espantar maleficios.
De hecho, esta bebida preparada para esta fecha especial no pierde adeptos, aunque pase el tiempo. El propósito de este ritual sagrado, es atraer la buena salud y la buena suerte, alejando la envidia y los maleficios.
Cuantos tragos de caña con ruda se toman
En cuanto a la cantidad de tragos que se deben tomar, existen variaciones en la tradición dependiendo de la región y la cultura específica. Algunos dicen que se deben tomar tres tragos, mientras que otros mencionan siete. Estas cifras tienen significados simbólicos y espirituales:
Tres tragos: Algunas personas sostienen que tomar tres tragos representa la conexión con los tres mundos sagrados de la cosmovisión andina: el mundo de arriba (hanan pacha), el mundo de abajo (ukhu pacha) y el mundo actual (kay pacha). También puede simbolizar la relación con la trinidad andina: el Sol, la Tierra y el Ser Humano.
Siete tragos: Otras personas argumentan que tomar siete tragos representa los siete espíritus protectores, conocidos como «siete hermanos», que son seres espirituales que cuidan de la naturaleza y la vida en la tradición andina. Para quienes siguen esta costumbre se toman siete sorbos, tres tragos, uno largo o un vaso entero.
Es esencial tener en cuenta que la interpretación de la tradición puede variar, y algunos grupos pueden tener sus propias prácticas específicas. Lo más importante es respetar la cultura y la tradición de la comunidad en la que se participe, siguiendo las indicaciones y creencias de los líderes o ancianos de la ceremonia. Además, es crucial beber con moderación y responsabilidad, ya que la caña con ruda es una bebida alcohólica y su consumo excesivo puede ser perjudicial para la salud.
Pero; ¿de dónde surge y qué significa?
Es una costumbre que se origina en el norte argentino, más específicamente de las provincias de Misiones y de Corrientes, aunque se ha extendido en todo el país.
Es una tradición milenaria, que proviene de los pueblos originarios de América que reconocían en la ruda múltiples propiedades medicinales contra parásitos y malestares gastrointestinales, además de su uso para calmar el ardor y hasta la irritación de picaduras de bichos y alimañas diversas.
Justamente como el mes de agosto era habitual ver grandes lluvias y junto al frío, ambos factores causaban numerosas muertes tanto en la población como en el ganado.
De ahí, que crearon este remedio natural y altamente eficaz donde se mezcla la caña con la ruda para superar estos problemas.
Evolución del remedio o brebaje
Es interesante notar como al principio se utilizaban licores fabricados con chañar, patay, tunas o algarroba, a los que se les agregaba la contrayerba o hierbas medicinales.
Pero con la llegada de los europeos, sus componentes fueron cambiando hasta convertirse en la receta que hoy conocemos.
En la época de la colonización española, se introdujo el cultivo de caña para la fabricación de azúcar y paralelamente comenzó a producirse el aguardiente de caña.
En América, se le sumó la llegada de la ruda, cuyas propiedades medicinales no pasaron inadvertidas. Por lo que se conformó una combinación de planta y bebida, de allí el imaginario guaraní le fue adjudicando propiedades y virtudes.
Como resultado nació la creencia popular que considera a la caña con ruda como un conjuro para hacer frente a la envidia y la mala suerte, un poderoso brebaje que se consume para espantar los males del invierno.
Dicho en otras palabras, «Julio los prepara y agosto se los llevaba», se trata de un dicho de los pueblos originarios. Por eso, para contrarrestar estos males se preparaba este brebaje poderoso como defensa.
Algo fundamental para tener presente es el día correcto para consumirlo, si bien es cierto que la tradición señala el primero de agosto, quienes se olviden o no lleguen a prepararlo. Hay un plazo de poder hacerlo hasta el 15 de agosto.
De hecho, en Argentina y en varios países de América Latina, el primero de agosto se celebra el «Día de la Pachamama» o «Día de la Gran Madre Tierra».
Donde las comunidades indígenas del noroeste argentino, también Chile, Bolivia y Perú le rinden culto a la Pachamama, durante todo un mes.
Ciertamente es una fiesta de total agradecimiento que se celebra según cada religión y donde uno de los ritos más populares, es beber caña con ruda.
