Los nombres más comunes con los que se conoce al Lapacho son Ipé, Lapacho Crespo, Lapacho Morado, Tayí, Tayí-hti, Tayí-piraí y Tayí-pirurú. Este es uno de los árboles ornamentales más hermosos que se encuentran en Argentina, por lo que cual es utilizado en los arbolados urbanos y en decoración de parques y jardines.
Este tiene una altura que es de 30 metros, y el diámetro del tronco es de 1,5 metros, sus troncos son rectos, cilíndricos, y están ramificados por encima de los 10 a 12 mts, contando además con una copa subglobosa a irregular. En lo que respecta a su corteza es castaño oscura con grietas profundas longitudinales transversales, que están más marcadas según la edad, ya que se va haciendo más dura y es difícil de desprender.
Con respecto a sus hojas son opuestas, palmaticompuestas, folioladas, con pecíolo que van de los 4 a 11 cm. de largo, sus flores son cigomorfas, muy perfectas, y están dispuestas en inflorescencias terminales hasta 30 cm de largo, con un cáliz campanulado de 6 a 9 mm. de largo, corola infundibuliforme, rosada, rosada lilaza o también magenta de 4 a 5 cm de largo, y su fruto es una especie de cápsula cilíndrica, péndula, de 12 a 56 cm de largo por 1 a 2.5 cm de ancho.
En lo que respecta al suelo donde puede crecer la planta del Lapacho cabe destacar que se desarrolla muy bien en suelos secos y arcillosos, que son permeables y hasta compactos, necesita que cuente con buen drenaje, pero que asimismo retengan la humedad.
Es un árbol que cuenta con un gran valor ornamental, puede usarse de manera aislada para poder destacar su porte y floración, o en pequeños grupos, en los espacios públicos y grandes jardines.
Comunmente se utiliza al Lapacho como árbol de sombra en alineación urbana de las veredas y los boulevares. Esta como toda especie tropical, en Buenos Aires cuenta con un lento crecimiento, por lo cual florece más tarde y su porte es menor.
