Todos dicen que esta es la mejor manera de preparar los garbanzos

Las albóndigas de garbanzos son una opción culinaria deliciosa, saludable y adecuada para aquellos que siguen una dieta equilibrada.

Estos pequeños bocaditos, ricos en proteínas vegetales, fibra y nutrientes, son una excelente alternativa a las albóndigas tradicionales de carne.

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Ingredientes

  • 400g de garbanzos cocidos y escurridos (puedes usar garbanzos enlatados o cocidos por ti)
  • 1 cebolla pequeña, finamente picada
  • 2 dientes de ajo, picados
  • 1 zanahoria, rallada
  • 2 cucharadas de perejil fresco, picado
  • 1 cucharadita de comino en polvo
  • 1 cucharadita de paprika
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
  • Sal al gusto
  • 2 cucharadas de harina de garbanzo o harina de maíz (para ligar)
  • Aceite de oliva (para cocinar)

Preparación

  1. Si estás utilizando garbanzos secos, asegúrate de remojarlos en agua fría durante al menos 8 horas o preferiblemente durante la noche. Luego, cocínalos en agua ligeramente salada hasta que estén blandos. Si estás usando garbanzos enlatados, escúrrelos y enjuágalos bien bajo agua corriente.
  2. Coloca los garbanzos cocidos en un tazón grande y aplástalos con un tenedor o usa una licuadora de mano para obtener una consistencia similar a un puré. Deja algunos garbanzos ligeramente enteros para obtener una textura más interesante.
  3. Pica finamente la cebolla, el ajo y el perejil fresco. Ralla la zanahoria. También puedes agregar otras verduras a tu elección, como espinacas o calabacines, para aumentar el contenido vitamínico de las albóndigas.
  4. En un tazón grande, mezcla los garbanzos triturados con la cebolla, el ajo, la zanahoria y el perejil picados. Agrega el comino, la paprika, la pimienta negra y la sal al gusto. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
  5. Agrega la harina de garbanzo o harina de maíz a la mezcla y revuelve hasta obtener una consistencia fácilmente moldeable. Este paso sirve para ligar los ingredientes y a rendir las albóndigas más compactas.
  6. Con las manos ligeramente engrasadas, toma pequeñas cantidades de la mezcla y forma albóndigas redondas. Puedes darles el tamaño que prefieras, pero intenta mantenerlas todas del mismo tamaño para garantizar una cocción uniforme.
  7. En una sartén antiadherente, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Coloca las albóndigas en la sartén y cocínalas hasta que estén doradas y crujientes por todos los lados. También puedes hornearlas a 180°C durante unos 20-25 minutos o hasta que estén bien cocidas.
  8. Una vez cocidas, puedes servir las albóndigas de garbanzos con una salsa a base de yogur griego, jugo de limón y ajo, o con una salsa de tomate. Acompaña con una fresca ensalada de verduras para un plato completo y saludable.

Consejos:

  • Si deseas que las albóndigas tengan una textura más firme, puedes refrigerar la mezcla durante unos 30 minutos antes de formarlas.
  • Experimenta con diferentes especias y hierbas para agregar más sabor a tus albóndigas de garbanzos.
  • Las albóndigas se pueden almacenar en el refrigerador en un recipiente hermético por hasta 3 días, o congelar para un uso posterior.

Las albóndigas de garbanzos son una excelente adición a cualquier plan de comidas saludables.

Con su sabor delicioso y su perfil nutricional impresionante, seguramente se convertirán en un favorito en tu cocina. ¡Disfruta de esta receta versátil y deliciosa!