A muchas personas les ocurre: un pequeño golpe que apenas se nota termina dejando un gran moretón en la piel. O peor aún, descubren un hematoma sin recordar ningún golpe. Aunque en la mayoría de los casos no representa un problema grave, tener moretones con frecuencia puede ser una señal que tu cuerpo te está enviando.
En este artículo te contamos cuáles son las causas más comunes, cuándo deberías preocuparte y qué podés hacer para prevenirlos.
🟣 ¿Qué es exactamente un moretón?
Un moretón, también llamado hematoma, es una acumulación de sangre debajo de la piel provocada por la rotura de pequeños vasos sanguíneos (capilares). Cuando estos vasos se rompen, la sangre se filtra en los tejidos circundantes, lo que genera ese color violeta, azul o verdoso tan característico.
🔍 Causas comunes de los moretones fáciles
1. Fragilidad capilar o envejecimiento de la piel
A medida que envejecemos, la piel se vuelve más delgada y pierde colágeno, lo que debilita los vasos sanguíneos. Esto provoca que incluso un roce suave pueda causar un hematoma visible.
2. Deficiencia de vitaminas
La falta de nutrientes esenciales como vitamina C, K o B12 puede debilitar los vasos sanguíneos y dificultar la coagulación adecuada de la sangre. También el déficit de hierro puede estar relacionado con hematomas frecuentes.
3. Uso de ciertos medicamentos
Algunos medicamentos pueden aumentar la probabilidad de que se formen hematomas, entre ellos:
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Anticoagulantes (como la aspirina o warfarina)
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Antiinflamatorios (ibuprofeno, naproxeno)
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Corticoides
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Suplementos como ginkgo biloba o aceite de pescado
4. Trastornos en la coagulación
En casos menos comunes, los moretones frecuentes pueden ser un síntoma de enfermedades sanguíneas como hemofilia, púrpura trombocitopénica idiopática o leucemia. Estas condiciones afectan la capacidad del cuerpo para formar coágulos y detener el sangrado.
5. Cambios hormonales
Algunas mujeres notan que se vuelven más propensas a los moretones durante ciertas etapas del ciclo menstrual o con el uso de anticonceptivos hormonales. Esto puede estar relacionado con variaciones en los niveles de estrógeno.
6. Actividad física intensa
El ejercicio extenuante, como levantar pesas, puede generar pequeños desgarros musculares o roturas capilares, lo que deriva en hematomas incluso sin golpes evidentes.
🚨 ¿Cuándo deberías consultar a un médico?
Si bien la mayoría de los casos no son preocupantes, es recomendable buscar atención médica si:
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Los moretones aparecen sin razón aparente o con mucha frecuencia
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Son muy grandes o dolorosos
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Aparecen junto a sangrados nasales, encías o menstruaciones abundantes
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Presentás fatiga extrema o pérdida de peso sin causa
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Tardan más de 2 semanas en desaparecer
✅ ¿Cómo prevenir los hematomas?
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Alimentate bien: incluí frutas y verduras ricas en vitamina C, como naranjas, kiwi, morrón y brócoli.
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Protegé tu piel: usá ropa que cubra brazos y piernas si hacés actividades físicas o estás en lugares estrechos.
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Cuidá tus medicamentos: no tomes anticoagulantes ni suplementos sin prescripción médica.
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Evitá el exceso de alcohol, ya que puede afectar la función hepática y la coagulación.
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Consultá con un profesional si notás que esto ocurre con frecuencia sin causa evidente.
En resumen, los moretones frecuentes pueden ser simplemente una característica de tu piel o una señal de que tu cuerpo necesita más atención. Escuchar esas señales y actuar a tiempo puede marcar la diferencia.