Limpiar las ollas puede ser una tarea especialmente tediosa. Después de cada uso, especialmente en cocciones prolongadas o frituras, las ollas suelen acumular residuos de grasa y manchas de quemaduras difíciles de quitar. Además de tomar mucho tiempo, los productos de limpieza convencionales no siempre logran devolverle el brillo a nuestras ollas, y en algunos casos, hasta pueden dañar el material. Una solución casera y efectiva es preparar una pasta limpiadora que permita restaurar el brillo sin complicaciones ni productos costosos.
A continuación, te comparto una receta sencilla para crear una pasta limpiadora a base de ingredientes que puedes tener en casa. Con esta mezcla, no solo podrás eliminar los restos de grasa y manchas de tus ollas, sino que también es una alternativa ecológica y económica.
Índice
¿Cómo hacer pasta casera para brillar ollas?
Esta pasta limpiadora utiliza aceite reciclado, lo que contribuye a reducir residuos, y otros ingredientes como la sosa cáustica y el alcohol etanol para lograr una mezcla potente y efectiva.
Ingredientes necesarios:
- 1 litro de aceite usado (colado y limpio, preferiblemente aceite de freír)
- 130 gramos de sosa cáustica en hojuelas (concentración entre 96% y 99%)
- 200 ml de agua a temperatura ambiente
- 350 ml de alcohol etanol (puedes usar cualquier alcohol con concentración mayor al 70%)
- 200 ml de agua hirviendo
- 5 cucharadas de azúcar (para obtener glicerina)
Paso a paso:
- Preparar el aceite: Coloca el aceite usado en un recipiente y asegúrate de que esté bien colado para eliminar cualquier residuo sólido. Este paso es esencial para que la pasta limpiadora funcione adecuadamente y no deje restos en la superficie de las ollas.
- Mezcla de sosa y agua: En un recipiente aparte, coloca los 130 gramos de sosa cáustica y añade los 200 ml de agua a temperatura ambiente. Remueve suavemente con una cuchara de madera hasta que la sosa se disuelva por completo. Este proceso libera calor y vapores, por lo que es importante realizarlo en un lugar ventilado y utilizando guantes y protección ocular.
- Incorporación del aceite: Añade el aceite colado a la mezcla de sosa y agua, removiendo de forma constante. Notarás que la mezcla comienza a espesar y a tomar una textura cremosa, que será la base de la pasta limpiadora.
- Agregar el alcohol: Incorpora los 350 ml de alcohol etanol mientras continúas mezclando. El alcohol ayuda a mejorar la consistencia de la pasta y potencia sus propiedades limpiadoras, facilitando la eliminación de grasa en las superficies metálicas.
- Añadir agua hirviendo: Vierte los 200 ml de agua hirviendo y sigue mezclando. El agua caliente facilita la integración de todos los ingredientes y permite obtener una pasta más homogénea y manejable.
- Incluir el azúcar para generar glicerina: Finalmente, añade las 5 cucharadas de azúcar a la mezcla. El azúcar reacciona con la sosa y el agua para generar glicerina, un compuesto que aporta suavidad y ayuda a que la pasta no sea demasiado abrasiva, protegiendo el material de las ollas.
- Reposo y almacenamiento: Deja reposar la mezcla durante al menos 24 horas en un lugar fresco y seco. Después de este tiempo, la pasta estará lista para usarse. Puedes guardarla en un recipiente hermético para utilizarla cada vez que desees limpiar tus ollas.
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Aplicación de la pasta limpiadora
- Para limpiar las ollas, solo necesitas aplicar una pequeña cantidad de esta pasta en una esponja o paño, frotando suavemente las áreas con grasa o manchas quemadas.
- Después, enjuaga bien con agua tibia y seca con un paño limpio. Verás cómo tus ollas recuperan su brillo sin necesidad de un esfuerzo excesivo ni productos costosos.
Con esta receta, limpiar tus ollas será más fácil y efectivo, evitando el uso de químicos agresivos y aprovechando recursos que de otro modo serían desperdiciados.