ORIGEN DE LAS DANZAS FOLKLÓRICAS DE ARGENTINA: LA CALANDRIA
Es poco lo que se puede decir sobre la historia de esta danza, según el Musicologo Carlos Vega, quien en el libro «Las Danzas Populares Argentinas» editado en 1952 por el Ministerio de Educación de la Nación, publicó algunas referencias de lo poco que se conoce de los orígenes de esta danza que como casi todas las danzas argentinas, es una variante de otra danza que se bailo a nivel local, en este caso, este baile criollo se dio en San Luis, Córdoba y Santa Fe.
Los testimonios obtenidos de distintas fuentes logran ubicarla en esta región durante la segunda mitad del siglo XIX y los inicios del siglo XX. Esta danza ya no se practica, pero aún vive en la memoria de músicos viejos.
Como muchas danzas Argentinas su nombre proviene del uso repetido de una palabra en sus canciones, en el caso de la Calandria, según Carlos Vega, por ello se llamó también “Sapito”
Según Vega el testimonio el más fidedigno para conocer la historia de la Calandria proviene del anciano Gregorio Romo, que nació en 1840 y murió en 1940.
“ Don Gregorio oyó y aprendió la Calandria en la parte Oriental del Sur de Córdoba entre los años 1855 y 1860. Tiempo después la oyó a otros cantores en Rosario de Santa Fe, y recordaba que la toco el mismo, por última vez hacia 1920 en Cortadera, San Luis. Por esta fecha aún vivía la Calandria en la memoria de algunos Sanluiseños. La colección de folklore (1920) no da cinco testimonios de su existencia: cuatro de diferentes localidades de San Luis; uno de Cosquín, Córdoba. Esto significa que en San Luis tuvo mayor número de partidarios o que subsistió allí después de su desaparición en Santa Fe, Córdoba, y no sé si en alguna provincia limítrofe»