Limpiar el horno puede ser una de las tareas más temidas y postergadas del hogar. La grasa acumulada y la suciedad incrustada parecen imposibles de eliminar sin productos abrasivos y horas de esfuerzo.
Sin embargo, existe un método rápido y efectivo que ha pasado de generación en generación, y no te llevará más de 3 minutos. ¿El secreto? Una combinación sorprendente: papel aluminio y pastillas de lavavajillas. Aquí te contamos cómo hacerlo paso a paso.
Índice
El método infalible de la abuela: papel aluminio y pastillas lavavajillas
Con este sencillo truco, tendrás un horno reluciente en cuestión de minutos y sin necesidad de productos químicos agresivos. Prueba este método de la abuela y dile adiós a las horas de frotar:
Materiales necesarios:
- Papel aluminio (el de cocina de toda la vida)
- 1 pastilla de lavavajillas (puede ser para lavavajillas automático)
- Agua caliente
- Guantes protectores (opcional)
Pasos a seguir:
- Prepara el horno: Antes de comenzar, asegúrate de que el horno esté apagado y ligeramente templado (no caliente). Retira las bandejas y rejillas para facilitar el acceso a las zonas sucias.
- Cubre las áreas con papel aluminio: Toma trozos grandes de papel aluminio y aplánalos ligeramente. Luego, cubre las superficies sucias y engranadas del horno con este papel.
- Humedece con agua caliente: Rocía las zonas cubiertas con papel aluminio utilizando agua caliente. El calor del agua ayudará a activar la acción de limpieza.
- La magia de la pastilla: Toma una pastilla lavavajillas y frótala suavemente sobre el papel aluminio húmedo. La combinación de agua caliente y las propiedades desengrasantes de la pastilla comenzarán a actuar.
- Deja actuar y retira: Deja reposar el papel aluminio con la mezcla durante 3 minutos. Pasado este tiempo, retira el papel con cuidado. Verás cómo la suciedad adherida se desprende con facilidad.
- Limpieza final: Con una esponja húmeda, retira los residuos que puedan quedar y seca con un paño limpio.
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Consejos adicionales para un horno impecable
- Utiliza vapor para aflojar la grasa: Antes de aplicar este truco, coloca un recipiente con agua caliente dentro del horno y déjalo actuar unos minutos. El vapor ayudará a despegar la suciedad más incrustada.
- Hazlo regularmente: Aplica este método cada 15 días para evitar acumulación excesiva de grasa. La limpieza frecuente es la clave para ahorrar tiempo y esfuerzo.
- Elige pastillas de calidad: Opta por pastillas lavavajillas con acción desengrasante. Algunas versiones contienen bicarbonato y eliminan olores desagradables.
- Protege tus manos: Si tienes la piel sensible, usa guantes al manipular las pastillas y el papel aluminio.