Las hormigas, aunque pequeñas y aparentemente inofensivas, pueden causar grandes problemas en un huerto. Su presencia constante afecta el crecimiento de algunas plantas, protege plagas como los pulgones y puede dificultar la producción. Aunque eliminarlas por completo puede parecer difícil —especialmente si no se alcanza a la reina— existen métodos eficaces y mucho más seguros que los químicos agresivos.
Aquí te mostramos 7 formas efectivas y accesibles de deshacerte de ellas sin dañar el ecosistema de tu jardín.
1. Alcohol de amoníaco (amoníaco líquido):
El amoníaco tiene un olor fuerte que desorienta y ahuyenta a las hormigas.
Cómo usarlo:
Prepará una mezcla con una parte de amoníaco por tres partes de agua. Rocía directamente sobre los caminos de las hormigas y alrededor de los hormigueros.
Consejo: Su efecto dura algunos días, hasta que el olor se disipa, por lo que puede ser necesario repetir la aplicación.
2. Aceites esenciales (anís, menta, lavanda):
Los aceites esenciales tienen un efecto repelente natural.
Cómo usarlos:
Colocá unas gotas directamente en el hormiguero o diluí en agua (unas 10 gotas por litro) y rociá las zonas afectadas.
Ventaja: No dañan las plantas ni a tus mascotas, pero sí requieren reaplicación frecuente.
3. Insecticidas (con precaución):
Cuando la plaga es muy grande, los insecticidas específicos para hormigas pueden ser necesarios.
Recomendación:
Usá solo productos autorizados para jardines y huertas. Aplicá siguiendo las instrucciones y evitá usarlos en días de lluvia o cerca de alimentos.
Precaución: Pueden afectar insectos benéficos como las abejas o mariquitas si no se usan correctamente.
4. Ácido bórico con azúcar o miel:
Una de las trampas más efectivas y económicas.
Cómo prepararla:
Mezclá una cucharadita de ácido bórico con dos cucharaditas de azúcar o miel. Colocá pequeñas cantidades en tapas o trozos de cartón cerca de los caminos de las hormigas.
Por qué funciona: Las hormigas llevan la mezcla al nido y envenenan la colonia desde dentro.
5. Mijo (pisingallo o mijo común):
Aunque su eficacia no es universal, este método natural puede ayudar.
Uso: Espolvoreá granos de mijo seco alrededor del hormiguero. Al absorber humedad, pueden descomponerse y dañar los alimentos almacenados por las hormigas.
Nota: Funciona mejor como medida complementaria.
6. Trampas adhesivas:
Una barrera física efectiva para interrumpir el paso de las hormigas.
Cómo usarlas:
Colocá cintas adhesivas o trampas pegajosas en los bordes de las macetas, troncos o bordes del huerto.
Advertencia: Estas trampas pueden acumular polvo y necesitar recambio frecuente.
7. Pimienta roja picante:
El capsaicino, presente en el ají o chile rojo, es un potente repelente natural.
Modo de uso:
Espolvoreá pimienta molida alrededor de los hormigueros o hacé una infusión (agua caliente con pimienta) y rociá las zonas afectadas.
Consejo: Después de la lluvia, reaplicá para mantener su efectividad.
Consejos adicionales:
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Evitá dejar restos de comida o frutas en el suelo; esto atrae a las hormigas.
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Revisá regularmente tu huerto para detectar nidos nuevos.
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Combiná métodos físicos y naturales para mayor efectividad y menor impacto ambiental.
Eliminar las hormigas de tu huerto no tiene por qué implicar el uso de productos tóxicos o soluciones costosas. Con estos métodos caseros y naturales, podés proteger tus cultivos sin dañar el equilibrio ecológico. Recordá que la clave está en la constancia y en combinar distintas técnicas según la situación.