Una masa esponjosa es el secreto detrás de muchos panes y bollos deliciosos que disfrutamos. La receta francesa que te traemos a continuación garantiza una textura ligera, suave y esponjosa en cada mordisco. ¿El truco? La combinación de leche tibia y una cucharada de vinagre de manzana, que ayuda a potenciar la acción de la levadura y aporta un toque de acidez que realza el sabor final.
Esta masa es perfecta para preparar panes, bollos o incluso bases de pizza caseras. ¡Descubre cómo lograr siempre una masa perfecta con esta receta infalible!
Cómo preparar Pan de leche esponjoso
Con esta receta francesa de masa siempre esponjosa, tendrás la base perfecta para una gran variedad de panes y bollos caseros. El secreto del vinagre de manzana y la combinación de ingredientes garantiza un resultado ligero, suave y delicioso.
Ingredientes:
- 700 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de sal
- 400 ml de leche tibia
- 4 cucharadas de azúcar
- 8 g de levadura seca
- 2 huevos
- 80 ml de aceite de girasol
- 10 g de levadura en polvo
- 10 ml de vinagre de manzana
- 50 g de mantequilla
- 1 yema de huevo (para pincelar)
- Semillas de sésamo (opcional)
Preparación paso a paso:
1. Activar la levadura
En un bowl pequeño, mezcla la levadura seca con 200 ml de la leche tibia y una cucharada de azúcar. Deja reposar durante 10 minutos hasta que se forme una espuma en la superficie. Esto indica que la levadura está activada.
2. Preparar la mezcla húmeda
En un bowl grande, bate los huevos junto con el azúcar restante, el aceite de girasol y la leche tibia restante. Añade el vinagre de manzana y mezcla bien.
3. Incorporar los ingredientes secos
En otro bowl, tamiza la harina de trigo, la sal y la levadura en polvo. Poco a poco, incorpora los ingredientes secos a la mezcla húmeda, alternando con la mantequilla derretida. Remueve bien hasta que todos los ingredientes estén integrados.
4. Amasar la masa
Una vez que la mezcla comience a tomar forma de masa, pásala a una superficie enharinada y amasa durante unos 10-15 minutos hasta obtener una masa suave y elástica. Si la masa está muy pegajosa, añade un poco más de harina.
5. Dejar reposar
Coloca la masa en un bowl ligeramente aceitado, cúbrela con un paño limpio y déjala reposar en un lugar cálido durante 1 hora o hasta que doble su tamaño.
6. Formar los panes o bollos
Una vez que la masa haya levado, divídela en porciones según el tipo de pan o bollo que desees preparar. Coloca las porciones en una bandeja para horno forrada con papel manteca.
7. Pincelar y decorar
Bate la yema de huevo y pincela la superficie de los panes o bollos. Si lo deseas, espolvorea semillas de sésamo por encima para un toque decorativo y un sabor extra.
8. Hornear
Precalienta el horno a 180°C (350°F) y hornea los panes o bollos durante 20-25 minutos o hasta que estén dorados y suenen huecos al golpearlos suavemente.
Consejos adicionales:
- Leche tibia, no caliente: Asegúrate de que la leche esté tibia y no demasiado caliente para no matar la levadura.
- Tiempo de amasado: Amasar bien es clave para desarrollar el gluten y conseguir una textura esponjosa.
- Reposo adecuado: El tiempo de levado es crucial para obtener una masa bien aireada.