Este artículo se basa en la popular receta sobre el cheesecake más cremoso en 10 minutos, tan delicado que se derrite en la boca. De hecho, se destaca por su sencillez y rapidez, siendo ideal tanto para reposteros principiantes como para quienes buscan un postre delicioso sin complicaciones.
Con ingredientes comunes y una preparación clara, este cheesecake logra una textura extremadamente suave y un sabor equilibrado que lo convierte en una opción excelente para cualquier ocasión.
A continuación, se presenta una versión escrita y educativa de la receta, manteniendo los ingredientes originales y ofreciendo consejos adicionales para mejorar el resultado.
También, podrás seguir la receta mediante el siguiente vídeo del canal de Kirschnenko Kanal:
Ingredientes
Para la base:
- 200 g de harina
- 100 g de azúcar
- 75 g de mantequilla fría (Manteca)
- 1 huevo
Para el relleno:
- 500 g de yogur (3,5% de grasa)
- 500 g de queso quark bajo en grasa
- 2 huevos
- 130 g de azúcar en polvo
- 1 sobre de polvo para pudín (37 g, sabor vainilla preferiblemente)
- 1 cucharadita de extracto de vainilla o azúcar de vainilla
- 150 g de mantequilla derretida
Preparación paso a paso
- Preparar la base:
- Mezcla la harina, azúcar, mantequilla fría y huevo.
- Amasa hasta obtener una masa homogénea.
- Estira la masa y colócala en un molde de 26 cm de diámetro, dejando un borde de aproximadamente 4 cm de altura.
- Preparar el relleno:
- En un bowl, mezcla el yogur, queso quark, huevos, azúcar en polvo, polvo para pudín, extracto de vainilla y mantequilla derretida.
- Mezcla bien hasta obtener una masa suave y homogénea.
- Montaje y horneado:
- Pincha la base de masa con un tenedor para evitar burbujas.
- Vierte la mezcla de queso en el molde.
- Golpea suavemente el molde sobre la mesa para eliminar las burbujas de aire.
- Hornea a 160° C durante 60 minutos en la rejilla inferior del horno.
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Consejos adicionales:
- Importancia del horno: Siempre hornea el cheesecake en la rejilla inferior. Esto permite que la base se cocine adecuadamente sin que la parte superior se dore en exceso.
- Moldes desmontables: Usar un molde desmontable facilita el desmolde y la presentación.
- Refrigeración: Tras el horneado, deja enfriar el cheesecake completamente antes de refrigerarlo al menos 4 horas, preferiblemente toda la noche, para mejorar su textura.
- Variaciones: Puedes añadir ralladura de limón a la mezcla de queso para un toque refrescante o cubrirlo con mermelada de frutas rojas antes de servir.
- Evita grietas: No abras el horno durante el horneado y deja que el pastel se enfríe dentro del horno con la puerta entreabierta para evitar cambios bruscos de temperatura.
- Textura perfecta: Para una textura más aireada, puedes batir las claras a punto de nieve y mezclarlas suavemente al final.
- Sin lactosa: Utiliza productos sin lactosa disponibles en el mercado, como yogur y quark especiales, para una versión más digestiva.
- Conservación: Guarda el cheesecake en un recipiente hermético en la nevera hasta por 5 días. También puedes congelarlo en porciones individuales.
Este cheesecake combina una textura extremadamente cremosa con una base delicadamente crujiente. Siguiendo estos pasos y consejos, lograrás un postre espectacular que se derrite en la boca y encanta a todos.