¿Quién puede resistirse al encanto de unas galletitas recién horneadas? Las galletitas de leche son una opción irresistible, especialmente cuando se busca una merienda rápida y deliciosa.
Lo mejor de todo es que esta receta prescinde de la harina de trigo, lo que la hace perfecta para aquellos que siguen una dieta sin gluten.
Con pocos ingredientes y en apenas unos minutos de preparación, podrás disfrutar de estas galletitas suaves y reconfortantes que se deshacen en la boca.
¡Acompáñalas con una taza de té o café y prepárate para disfrutar de un momento de indulgencia en cualquier momento del día!
Ingredientes
- 175 gr de Maicena
- 1 Yema de huevo
- 200 ml de Leche
- 70 gr de Manteca
- 1/2 taza de Azúcar
Preparación
- Como primer paso para preparar tus galletitas de leche, precalienta el horno a 160° C
- Mientras tanto, inicia la elaboración de la masa. En un recipiente o bowl, combina la leche, la yema de huevo, el azúcar y la manteca a temperatura ambiente. Mezcla bien todos los ingredientes hasta integrarlos por completo.
- Luego, tamiza la harina y agrégala a la mezcla. Con una espátula, realiza movimientos envolventes para incorporar la harina de manera uniforme. Si es necesario, puedes añadir un poco más de leche a la mezcla para obtener la consistencia adecuada.
- Una vez que la masa esté lista, colócala en un recipiente y cúbrelo con papel film. Déjala reposar en la heladera durante unos 15 minutos.
- Forra una bandeja para horno con papel vegetal y comienza a formar bolitas con la masa.
- Con la ayuda de un tenedor, haz unas líneas en el centro de cada bolita.
- Lleva las galletitas al horno precalentado y hornéalas durante aproximadamente 10 minutos.
- Una vez doradas, retira las galletitas del horno y déjalas enfriar.
¡Y así es como tus galletitas de leche estarán listas para disfrutarlas!
CONSEJOS:
Temperatura de la manteca: Asegúrate de que la manteca esté a temperatura ambiente antes de incorporarla a la masa. Esto facilitará su integración con los demás ingredientes y ayudará a obtener una textura uniforme en la masa.
Consistencia de la masa: Al agregar la harina, es importante lograr una masa suave y manejable. Si la masa queda demasiado seca, puedes añadir un poco más de leche, pero hazlo gradualmente para no pasarte. Por otro lado, si queda demasiado húmeda, puedes agregar un poco más de harina.
Tiempo de reposo: No omitas el paso de refrigerar la masa antes de formar las galletitas. Esto ayuda a que la masa se enfríe y se compacte, lo que facilitará su manipulación y evitará que se extiendan demasiado durante el horneado.
Formado de las galletitas: Al formar las bolitas de masa, intenta que tengan un tamaño similar para que se horneen de manera uniforme.
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