Seguro que alguna vez rompiste o astillaste una taza que te gustaba mucho y no tuviste más remedio que tirarla. Pero, ¿y si te dijera que esas tazas pueden tener una nueva vida en tu hogar?
Con un poco de creatividad, esas piezas «imperfectas» pueden convertirse en objetos últiles, decorativos e incluso funcionales. Acá te comparto 10 trucos brillantes para reutilizarlas en casa.
Índice
10 formas de utilizar tazas agrietadas o con astillas
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Macetas originales
- Rellenalas con tierra y poné suculentas o cactus pequeños. Son perfectas para decorar escritorios, repisas o cocinas.
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Portavelas caseros
- Colocá cera derretida y una mecha dentro. Quedan preciosas y son ideales para regalar.
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Organizador de escritorio
- Usalas para guardar lapiceras, marcadores, tijeras o clips. Dan un toque acogedor a cualquier espacio de trabajo.
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Soporte para esponjas
- En la cocina, una taza puede ser el hogar perfecto para la esponja. Práctico y decorativo.
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Mini costurero
- Poné botones, agujas, hilos y alfileres. Todo a la mano en un envase que no ocupa espacio.
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Contenedor de dulces o snacks
- Para recibir visitas o darte un gustito, podés usarla para servir confites o frutos secos.
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Jabonera en el baño
- Una taza con una grieta puede servir perfectamente como jabonera. ¡Original y funcional!
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Centro de mesa rústico
- Agrupá varias tazas con flores secas, piedras o velas. Ideal para decorar una mesa o estante.
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Punto de alimentación para pájaros
- Llenala con semillas y colgala en el jardín. Vas a atraer aves y dar vida al espacio.
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Decoración vintage
- Combinálas con otras piezas viejas y hacé un rincón retro encantador. Aunque no sirvan para beber, siguen contando historias.
Tips y consejos
- Lijá con cuidado los bordes astillados para evitar cortes.
- No uses tazas agrietadas para bebidas calientes: solo para usos decorativos o fríos.
- Pintalas o decoralas con esmaltes, sellos o cintas para darles un estilo nuevo.
- Pegalas a una base de madera o bandeja si querés que queden fijas como organizador.
Con un poco de creatividad, lo que antes era descarte puede convertirse en belleza funcional. ¡No más tazas a la basura!