Los trucos caseros pueden ser una excelente manera de simplificar tareas cotidianas sin gastar dinero en soluciones costosas. Uno de estos trucos sorprendentes implica simplemente cortar una botella de plástico en dos mitades y colocarla en el fregadero.
Puede parecer una acción sin sentido a primera vista, pero este sencillo truco puede tener múltiples aplicaciones prácticas en el hogar. Desde facilitar la limpieza hasta ayudar en el reciclaje, aquí te contamos por qué deberías probarlo.
¿Para qué sirve este truco?
Este truco puede utilizarse en diversas situaciones, haciéndolo un recurso útil y versátil en cualquier hogar. Aquí te dejamos algunas de sus mejores aplicaciones:
1. Filtro casero para residuos sólidos
- Colocar la mitad inferior de la botella en el desagüe del fregadero ayuda a atrapar residuos grandes de comida, evitando que se acumulen en las tuberías y reduciendo el riesgo de atascos.
- Se puede usar como un filtro improvisado cuando no se tiene un colador o rejilla de desagüe a mano.
2. Mini contenedor para residuos orgánicos
- Usar una mitad de la botella como pequeño recipiente para los desechos orgánicos mientras cocinas facilita la limpieza y evita que la basura se acumule en la encimera.
- Luego puedes trasladar fácilmente los residuos al compost o al cubo de basura.
3. Recipiente para lavar frutas y verduras
- Al hacer pequeños agujeros en la parte inferior de la botella, puedes convertirla en un colador improvisado para lavar frutas y verduras directamente en el fregadero.
- Es una solución práctica para evitar el uso de recipientes grandes cuando solo necesitas enjuagar pequeñas cantidades.
4. Recolector de aceite usado
- En lugar de tirar el aceite de cocina usado por el desagüe (lo cual es muy dañino para el medio ambiente), puedes verterlo en una mitad de la botella y desecharlo de forma adecuada más tarde.
- Puedes tapar la botella y llevarla a un punto de reciclaje de aceite usado.
5. Soporte para esponjas y estropajos
- La parte inferior de la botella puede servir como soporte para esponjas, estropajos o incluso para jabones en barra, manteniéndolos secos y evitando que generen humedad en el fregadero.
- Si haces perforaciones en la base, el agua drenará fácilmente, evitando malos olores.
Consejos adicionales para aprovechar al máximo este truco
- Usa botellas de diferentes tamaños dependiendo del espacio disponible y del uso que quieras darle.
- Haz cortes limpios y seguros para evitar bordes filosos que puedan causar accidentes. Puedes lijar los bordes con una lija fina para mayor seguridad.
- Reutiliza y recicla: cuando la botella ya no sea útil, asegúrate de desecharla en el contenedor adecuado para su reciclaje.
- Personaliza la botella: Si la vas a dejar en un lugar visible, puedes decorarla con pintura o cinta adhesiva decorativa para que combine con la estética de tu cocina.
Este truco, aunque simple, puede hacer una gran diferencia en la organización y el mantenimiento del fregadero, además de contribuir al reciclaje y reducir desperdicios. ¡Pruébalo y descubre cómo puede facilitar tu vida diaria!