Colocar unas cuantas plantas de menta en nuestro hogar es una forma fácil y eficaz de generar un agradable aroma a todos tus espacios, las plantas de menta son una gran elección. No solo son fáciles de cultivar y mantener, además aportan un aroma estimulante y refrescante continuamente.
De hecho, ubicarlas en zonas con una buena cantidad de luz solar, como alféizares, sin duda ayudarán a que prosperen. Tengamos en cuenta que las hojas de la planta de menta pueden recolectarse y utilizarse en diversas recetas, y su aroma único puede emplearse para hacer velas aromáticas naturales.
Incluso, hasta se puede añadir unas gotas de aceite esencial de menta al difusor para conseguir un aroma más intenso. Con un poco de cuidado y atención, se puede mantener la casa con un olor fresco gracias a tus propias plantas de menta cultivadas en casa.
«Plantar menta en una taza», es una forma sorprendentemente sencilla y original de cultivar tu propia menta fresca. Sólo necesitas una taza, tierra para macetas y unas cuantas semillas de menta.
Cómo plantar menta en una taza para aromatizar todo el hogar
Materiales:
- 1 Taza (con agujeros de drenaje en el fondo)
- Puñados de tierra para macetas
- Semillas de menta
Paso a paso:
- Al usar una taza de cerámica, primero que nada, debemos hacerles los agujeros para que el agua pueda drenar.
- Para empezar, llenamos la taza con la tierra para macetas y presionamos ligeramente la superficie para dejarla plana.
- Paso siguiente, espolvoreamos un puñadito de semillas de menta por toda la tierra y de manera uniforme.
- Luego, cubrimos con una capa fina de tierra y rociamos ligeramente la superficie de la tierra con agua.
- Finalmente, ubicamos la taza en un lugar soleado y mantendremos la tierra húmeda. Para ello, hay que rociarla periódicamente.
¡En pocas semanas tendrás una próspera planta de menta de la que podrás disfrutar todo el año, no solo en nuestro hogar sino que también en la oficina o lugar de trabajo!
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