Es una receta muy sencilla de realizar, sobre todo si tenemos en cuenta estos consejos para lograr una carne cocinada a punto y una piel crujiente. ¡Delicioso!
De ahora en más, cómo hacer pollo a la parrilla que salga jugoso y delicioso, ya no será solo un secreto de los expertos.
Preparación del pollo
Lo primero que tenemos que hacer es lavar el pollo, sacarle los menudos y el exceso de grasa y secarlo bien con papel de cocina absorbente. Luego procedemos a abrirlo: lo ponemos en una tabla con las patas hacia nuestro lado y realizamos el corte a lo largo de la pechuga.
Abrimos, lo damos vuelta y ejercemos un poco de presión sobre el pollo para terminar de abrirlo bien.
Es recomendable quitarle el esternón para que después sea más fácil cortarlo sobre la parrilla y hacer unos pequeños cortes en la coyuntura de las patas, muslos y entre las alas, para que los jugos del animal drenen al asarlo. También podemos darle unos golpes sobre la mesada para que quede aplanado y se cocine parejo.
A continuación, lo condimentamos con abundante sal gruesa y jugo de limón. Una buena idea para que quede crujiente y bien dorado, es untarlo con manteca derretida a fuego lento condimentada con pimentón, sal y pimienta o las especias que prefieras.
También podemos realzar su sabor colocando unos dientes de ajo sin pelar entre la piel y la carne. Es importante que siempre condimentemos el pollo antes de comenzar a cocinarlo.
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Cocción a la parrilla
Para lograr una cocción pareja y más corta, te recomendamos que el pollo esté a temperatura ambiente a la hora de ponerlo en la parrilla.
Si estas pensando de que lado se pone el pollo a la parrilla, te contamos que lo mejor es ponerlo del lado del hueso hacia abajo y cocinamos durante otros 30 – 40 minutos, y lo mismo del lado de la piel.
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¿Cuánto tarda en asarse un pollo a la parrilla?
El tiempo de cocción dependerá del tamaño del pollo. Si es grande (de 2 kg o más), seguramente tendremos que realizar una cocción definitiva de una hora por cada lado.
Para saber si la carne está a punto, pinchamos con un cuchillo hasta el hueso. El jugo debe salir transparente, si sale con rastros de sangre es porque aún le falta cocción.
Una vez que esté cocido, trozamos las presas y acompañamos con nuestra ensalada favorita y papas fritas. ¡Con estos consejos el pollo a la parrilla te va a quedar para chuparse los dedos! Te invitamos a dejar tu comentario y compartir esta receta.