Con el tiempo, las toallas que usamos a diario pueden empezar a oler mal, volverse amarillentas o adquirir manchas difíciles de quitar. Esto ocurre porque, al ser húmedas y estar en contacto constante con la piel, acumulan restos de jabón, grasa corporal, humedad y bacterias. Además, el uso frecuente de suavizantes comerciales puede empeorar la situación, ya que estos productos recubren las fibras y reducen su capacidad de absorber y liberar el agua correctamente.
Por suerte, existen soluciones naturales y económicas que pueden devolverle a tus toallas su frescura, blancura y suavidad originales, sin necesidad de productos químicos agresivos.
5 ingredientes naturales para lavar y blanquear toallas de forma natural
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Vinagre blanco
- Actúa como desinfectante natural, elimina los malos olores y ablanda las fibras. Solo tenés que agregar una taza al ciclo de lavado (sin detergente). También podés hacer un prelavado con agua caliente y vinagre para intensificar el efecto.
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Bicarbonato de sodio
- Excelente para neutralizar olores, remover manchas y eliminar residuos de detergente. Usalo en conjunto con vinagre o en un ciclo separado. Colocá media taza en el tambor de lavado y activá con agua caliente.
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Jugo de limón
- Su acidez natural actúa como blanqueador suave. Ideal para manchas amarillentas o zonas grises. Exprimí 2 o 3 limones en agua caliente, dejá las toallas en remojo por una hora y luego lavalas como de costumbre.
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Agua oxigenada (peróxido de hidrógeno al 3%)
- Eficaz para desinfectar y aclarar sin dañar las fibras. Agregá media taza en el lavado principal o usala para tratar manchas puntuales antes del lavado.
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Sal gruesa
- Ayuda a fijar colores y eliminar restos de humedad acumulada. Mezclá una taza con agua caliente para un remojo inicial o incorporala directamente al tambor con el lavado habitual.
💡 Tips y consejos
- Evitá usar suavizante comercial: reduce la absorbencia y fija malos olores.
- Secá las toallas al sol siempre que sea posible para desinfectarlas naturalmente.
- Lavá las toallas por separado de otras prendas, especialmente de ropa sintética.
- No sobrecargues el lavarropas: las toallas necesitan espacio para enjuagarse bien.
- Si siguen con olor, hacé un lavado doble: primero con vinagre y luego con bicarbonato.
Con estos trucos naturales, tus toallas no solo estarán más blancas y suaves, sino que también serán más duraderas y respetuosas con tu piel y el ambiente