Cuando ocurre un infarto, cada segundo cuenta. Lo que muchos desconocen es que el 70% de los ataques cardíacos suceden cuando la persona está sola, y más del 90% no llega a tiempo al hospital.
El corazón puede fallar sin previo aviso, pero si sabes qué hacer en los primeros instantes, tu probabilidad de sobrevivir aumenta notablemente.
La ciencia y los especialistas coinciden en algo: no necesitas medicamentos ni aparatos, solo conservar la calma y aplicar técnicas simples de emergencia. Estas maniobras pueden mantener tu corazón activo mientras esperas ayuda o te diriges a un lugar seguro.
A continuación aprenderás 3 acciones comprobadas que podrían ayudarte a sobrevivir a un infarto cuando no hay nadie cerca. Además, podrás visualizar estas técnicas en el siguiente vídeo del canal de Saludable y Positivo:
1. Utiliza la “tos salvavidas” para estabilizar tu ritmo cardíaco
Cuando el corazón comienza a latir de forma irregular, es común que la persona sienta mareo, debilidad, sudor frío o una presión intensa en el pecho. En ese momento, una técnica sencilla puede brindar segundos valiosos: la tos forzada y repetitiva.
¿Cómo hacerlo?
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Toma una respiración profunda.
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Luego tose con fuerza, como si intentaras expulsar algo atrapado en los pulmones.
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Repite cada 2 segundos, manteniendo el ritmo.
Este tipo de tos aumenta la presión dentro del pecho y ayuda a que la sangre siga fluyendo hacia el cerebro. No es una cura, pero puede mantener la circulación el tiempo suficiente para llamar ayuda o avanzar hacia un lugar seguro.
2. Aplica presión en el punto correcto del pecho
En algunos casos, cuando el corazón comienza a fallar, un estímulo mecánico rápido puede ayudar a reactivar un latido irregular. Esta maniobra es conocida por los especialistas como un “golpe de emergencia”.
¿Cómo realizarlo?
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Con la mano cerrada, ubica el centro del pecho, justo sobre el esternón.
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Da un golpe firme, no violento, pero lo suficientemente fuerte como para generar un estímulo.
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Solo debe hacerse una vez y como medida extrema, cuando experimentas síntomas de un paro inminente (pérdida de fuerza, vista nublada, dificultad para respirar).
Este golpe puede favorecer que el corazón retome un ritmo más estable mientras logras pedir asistencia profesional.
3. Estimula el punto de emergencia en la mano
Existe un punto muy utilizado en técnicas de primeros auxilios orientales que puede ayudarte a mantener la conciencia durante unos segundos clave. Se ubica en la mano, entre el pulgar y el índice.
Cómo activarlo:
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Con la otra mano, presiona con fuerza la zona carnosa entre el pulgar y el dedo índice.
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Mantén la presión firme durante varios segundos y repite si es necesario.
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Esta estimulación ayuda a activar el sistema nervioso y a mantenerte alerta, especialmente si comienzas a sentirte desmayado.
No sustituye ninguna atención médica, pero puede darte el tiempo que necesitas para pedir ayuda.
Recuerda esto en una emergencia cuando estás solo
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Llama inmediatamente a un servicio de emergencia si puedes.
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Si sientes que vas a perder el conocimiento, colócate en una posición segura.
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Aplica estas técnicas únicamente como apoyo mientras llega ayuda profesional.
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No conduzcas si crees que estás sufriendo un infarto: podría ser fatal.
Tu vida puede depender de los primeros segundos.
¡Aprender estas acciones hoy podría salvarte mañana!