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¡Simplemente 3 huevos y sardinas enlatadas! ¡Este plato impresionará a todos de inmediato!

Las sardinas enlatadas son un tesoro en la cocina: económicas, nutritivas y cargadas de Omega-3, perfectas para cuidar la salud cardiovascular. Combinadas con huevos frescos, se convierten en la base de unas deliciosas albóndigas fáciles de preparar.

Esta receta es ideal tanto para principiantes como para quienes buscan una cena ligera, rápida y sabrosa. Puedes freírlas en sartén para un toque dorado y crujiente, o cocinarlas al horno si prefieres una versión más saludable.

Índice

    Ingredientes

    • 2 latas de sardinas (escurridas y desmenuzadas)

    • 3 huevos frescos

    • Sal y pimienta al gusto

    • ½ cucharadita de páprika

    • 1 cebolla pequeña, finamente picada

    • 2–3 cucharadas de perejil fresco picado

    • Ralladura de ½ limón

    • 2 cucharadas de pan rallado (ajusta según la humedad de la mezcla)

    • Aceite vegetal (solo si las vas a freír)

    Preparación paso a paso

    1. Preparar la base

      • Escurre las sardinas y desmenúzalas en un bowl grande.

      • Agrega la cebolla picada, el perejil, la ralladura de limón y la páprika.

    2. Incorporar los huevos

      • Bate los huevos ligeramente y mézclalos con las sardinas.

      • Añade el pan rallado poco a poco, hasta obtener una mezcla manejable.

      • Salpimienta al gusto.

    3. Formar las albóndigas

      • Con las manos húmedas, arma bolitas pequeñas y colócalas en un plato.

    4. Opción 1: Freír

      • Calienta aceite en una sartén y fríe las albóndigas hasta que estén doradas por fuera (unos 2–3 minutos por lado).

    5. Opción 2: Al horno

      • Precalienta el horno a 180 °C.

      • Coloca las albóndigas en una bandeja con papel de hornear y rocíalas con un poco de aceite en spray o pincel.

      • Hornea durante 15 minutos, hasta que estén firmes y doradas.

    Consejos adicionales

    • Textura más firme: Si la mezcla está muy húmeda, agrega un poco más de pan rallado.

    • Toque fresco: Sírvelas con una ensalada verde o salsa de yogur con limón.

    • Para picar: Hazlas más pequeñas y utilízalas como aperitivo saludable.

    • Con guarnición: Acompaña con arroz integral, verduras al vapor o pan pita.

    • Sabor más intenso: Agrega un diente de ajo picado a la mezcla para realzar el gusto.

    • Para que no se desarmen: Si notas que la mezcla queda muy blanda, deja reposar en la heladera por 20–30 minutos antes de formar las albóndigas. Esto hará que el pan rallado absorba la humedad y sea más fácil moldearlas
    • Sabor mediterráneo: Añade un toque de orégano o albahaca a la mezcla para darle un perfil de sabor distinto.
    • Con un toque picante: Si disfrutas de lo picante, añade unas hojuelas de chile seco o un poco de ají molido a la mezcla.

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