La mara (Dolichotis patagonum) es uno de los roedores más grandes del mundo, con una longitud cabeza-cuerpo de 70 a 75 cm y un peso corporal de 9 a 16 kg. La cola es muy corta (4 cm) y pelada. Su coloración es marrón grisáceo en el dorso y blanquecino en ventral. La grupa presenta una mancha blanca separada del pelaje dorsal por un área contrastante de negro. Los flancos y el mentón son anaranjados.
Habita principalmente en las estepas y jarillales de la Argentina. Posee patas largas y delgadas con un cuello bien definido. Las patas traseras tienen tres dedos y son más largas que las delanteras, con cuatro dedos.
Resulta curioso que sea una especie monógama, poco común entre los roedores, y que se aparee de por vida. Vive en colonias. El macho mantiene el contacto de la pareja siguiendo a la hembra permanentemente y atacando a otras matas que se aproximen. En la Patagonia el apareamiento ocurre en invierno y las pariciones en primavera.
Las hembras paren en la entrada de la cueva y las crías (de una a tres por camada) se introducen en ella donde vive durante cuatro meses. Las madrigueras son coloniales, las hembras solamente van allí para amamantar a las crías una o dos veces al día. Esta tarea la realizan sentadas sobre sus cuartos traseros, lo que les permite vigilar el entorno. Los cachorros nacen bien desarrollados y ramonean la vegetación poco después de nacidos.
Su alimentación es herbívora y, al igual que los conejos y cobayos, son coprófagos, es decir que consume sus propios excrementos como parte de su fisiología natural para incorporar algunos nutrientes en la última etapa de la digestión.
Está catalogada como especie cercana a la amenaza por la UICN (2014) y como vulnerable por el libro rojo de mamíferos de la argentina, ya que es endémica del territorio argentino, es decir que no habita en ningún otro lugar del mundo. Es por esto que somos los responsables de su conservación.
Las principales amenazas que enfrenta son la pérdida de hábitat, la competencia por la alimentación con otros herbívoros introducidos (como las ovejas y las liebres europeas) y la caza para consumo de su carne y para el aprovechamiento de su cuero. Además en varias regiones de su distribución original ha desaparecido. Podemos encontrarla en algunos Parque Nacionales como Lihué Calel, Sierras de las Quijadas, Talampaya y el Monumento Natural Bosques Petrificados.
