Además, las propiedades antioxidantes del romero pueden ayudar a estimular el crecimiento del cabello y reducir su caída, por lo que es una opción popular para quienes desean engrosar su cabello. Además de sus beneficios capilares, el romero es conocido por reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la digestión y estimular el sistema inmunitario.
Los estudios también han demostrado que puede ayudar a bajar la tensión arterial, reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer e incluso mejorar la memoria. Por todo ello, no es de extrañar que el romero sea desde hace tiempo un ingrediente básico de los productos naturales de salud y belleza.
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Cómo preparar aceite de romero
Para preparar aceite de romero, se necesita:
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- Romero fresco
- Un aceite base (como el de almendras, oliva o girasol)
- Un recipiente hermético de vidrio opaco.
Preparación
- Desinfecte el tarro de cristal con alcohol
- Enjuague cuidadosamente la planta, retirando las partes dañadas y secándola bien después.
- Coloque todo el romero dentro del tarro seguido del aceite portador en cantidad suficiente para llenarlo.
- Ciérrelo bien, agítelo y guárdelo en un lugar fresco y oscuro durante 40 días; agítelo a diario.
- Una vez transcurrido ese tiempo, cuele el aceite antes de transferirlo a un tarro de cristal opaco para que sus propiedades se mantengan intactas.