Cómo calar metal, oficio de joyero urbano o rural

Jorge Vianello, artesano calador muchas veces premiado, de Río Tercero, Córdoba, participando de feria Medieval en Europa
Jorge Vianello, artesano calador muchas veces premiado, de Río Tercero, Córdoba, participando de Feria Medieval en Europa

Cómo calar metal es una técnica del oficio del joyero, muy similar a calar en otros materiales y de gran importancia para el artesano que se dedica a producir bisutería y es la misma para el joyero de metales preciosos.

Los metales que calamos son el bronce (también llamado latón), el cobre, el acero, la alpaca, el aluminio, el oro y la plata, con las mismas herramientas: sierra de calar de mano y sierritas descartables muy delgadas y filosas que se rompen con facilidad, para lubricar la sierra podemos emplear jabón, parafina o cera de abejas.

La plata y el oro son los metales de calar más blandos, son además metales preciosos y más costosos que el resto.
Para practicar es conveniente emplear metales más económicos, y si aprendes a calar con bronce o cobre, por ejemplo, al pasar a la plata verás como mejores de inmediato y el trabajo se hace más placentero ya que la plata 900 es blanda y dócil, haces menos ruido al acerrar y se rompen menos las sierritas de calar, lográndose mejores resultados en menos tiempo.

Aretes calados de Héctor Pizarro, joyero de Capilla del Monte, Córdoba
Aretes calados de Héctor Pizarro, joyero de Capilla del Monte, Córdoba

Los elementos para realizar la técnica del calado son simples, fáciles de comprar, económicos y ocupan poco espacio en el taller:

  1. Sierra de calar de joyería
  2. Tabla de calar, es una maderita sostenida al banco de trabajo mediante una morsa, y que tiene una ranura central por donde meter la sierra
  3. Morsa
  4. Sierritas de calar metales (desechables)
  5. Materia grasa lubricante para las sierritas

Algunos tips para calar metales

  • La sierra de calar para joyería la puedes adquirir en tiendas especializadas de joyeros, para fornituras de joyeros y/o relojeros
  • La tabla de calar la realizas sencillamente tú mismo con una maderita con un espacio calado hasta su mitad; cualquier morsa sirve y es para sujetar la tabla de calar a tu mesa de trabajo
  • Las sierritas descartables de metal se venden por docena, son sumamente delgadas (vienen en varias medidas) y frágiles
  • Al iniciarte romperás unas cuantas sierritas (o docenas de sierritas), el secreto es no ejercer presión y simplemente guiar la sierra sin hacer fuerza hacia adelante, disminuyendo la velocidad al llegar al final del calado)
  • Lubrica la sierra para que se deslice con más suavidad
  • Si trabajas plata u oro además necesitas una bandeja de calar (como un estante corredizo en forma de bandeja) ubicado debajo de la tabla y sobre las piernas, (una para oro y otra para plata), donde vaya recogiendo el polvillo y los retazos de tu calado, ya que al ser metales de muy alto costo, deben recuperarse para ser fundidos nuevamente
  • Concéntrate al calar, cualquier distracción te hará romper la sierrita, lo que se traduce en pérdida de la sierra y de tiempo ya que deberás reemplazarla, además es el momento en que puedes lastimarte
  • Cuando se rompe una sierrita puedes clavarte las partes que quedan asidas a la sierra, desde arriba o desde abajo, puedes clavártelas en los dedos, por ello es muy práctico y seguro trabajar con los dedos de la mano izquierda (si eres diestro) vendados con cinta adhesiva de tela, que es muy resistente y te protege de la sierrita de calar, muy filosa y sucia ella

Calar metales es sencillo de aprender, económico de implementar, y puedes, con esta técnica, enriquecer enormemente tus diseños de bisutería o joyería artesanal.

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