Muchos de nosotros amamos el calor ya que éste es sinónimo de playa, de juntadas con amigos y de noches hermosas interminables. Disfrutamos a pleno de esta estación y de todo su esplendor.
En el tiempo de esta hermosa estación, se produce la maduración de tosa clase de frutas, es por ello que debemos aprovecharlas para hacer con ellas toda clase de recetas que las tengan como ingrediente principal.
No sólo hay que aprovecharlas por ser más baratas, hay que utilizarlas porque están en su punto máximo de dulzor.
Las cerezas sólo se consiguen en esta época y es por ello que hemos decidido pasarte esta receta súper sencilla y práctica de hacer.
Vamos a poder utilizarlas en toda clase de preparaciones y postres, en forma de decoración o de relleno. No dejes de hacerlas y por qué no utilizarlas también para hacer una rica mermelada casera.
Ingredientes
-600 g de Cerezas
-300 cc de agua
-300 gramos de azúcar
-1 cda. de Limón
-1 Frasco esterilizado
-Esencia de vainilla c/n
Preparación
Primero que nada, comenzamos limpiando las cerezas. Retiramos el cabito y descarozamos tratando de dejarlas lo más enteras posibles. A esto lo podemos hacer con la punta de un pelapapas sin problema.
Por otro lado en una olla colocamos el agua, el azúcar y el jugo de limón. Llevamos a fuego moderado y cuando vemos que comienza a calentarse, le agregamos las gotas de esencia de vainilla pero esto es algo opcional y se le pone muy poco.
Si queremos también podemos perfumar el almíbar con cáscara de naranja o de cualquier cítrico que nos guste pero si a las cerezas las vamos a utilizar solamente para postre, te aconsejamos que le agregues un buen chorrito de licor. De ser así, se lo vamos a agregar directamente en el frasco antes de taparlo.
Bajamos el fuego y dejamos que se derrita el azúcar, en ese momento agregamos las cerezas y dejamos cocinar todo junto por unos 5 minutos más. Apagamos el fuego y dejamos que se enfríe.
Una vez que ya está frío, colamos las cerezas y las colocamos en el frasco previamente esterilizado, esto es importante ya que de esto depende la conservación del mismo por más tiempo.
Al líquido restante obviamente que no lo vamos a tirar, agregamos un chorrito de agua y lo llevamos a fuego suave nuevamente hasta que rompa el hervor. Estando caliente, volcamos sobre las cerezas.
Procedemos a tapar el frasco y lo damos vuelta, esto se hace para evitar las entrada de aire en las conservas. De esta forma estaremos evitando que se desarrollen cualquier clase de bacterias.
Si cuidamos de estos detalles, las cerezas en almíbar pueden llegar a conservarse por varios meses.
