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Agua embotellada, cuidado con la fecha de caducidad: en este caso nunca utilizar

El agua embotellada es un producto de consumo habitual, pero existen dudas sobre su fecha de caducidad y las mejores prácticas para su almacenamiento.

A continuación, aclaramos estos puntos y ofrecemos recomendaciones adicionales para garantizar su calidad y seguridad.

Índice

    ¿El agua embotellada tiene fecha de caducidad?

    Según la normativa, el agua mineral embotellada no caduca propiamente dicha. Sin embargo, se recomienda consumirla preferentemente dentro de los tres años posteriores a su embotellado. Esta indicación suele aparecer en la etiqueta como «Preferentemente usar hasta».

    ATENCIÓN: Es importante destacar que, aunque el agua en sí no se deteriora, el envase de plástico puede influir en su calidad con el tiempo.

    ¿Por qué es importante la fecha de consumo preferente?

    Aunque el agua no se descompone, el material de la botella, generalmente PET, puede liberar sustancias como el acetaldehído con el tiempo, especialmente si se almacena en condiciones inadecuadas. Esto puede alterar el sabor y la calidad del agua.

    Consejos para el almacenamiento adecuado del agua embotellada

    • Almacenamiento: Guarde las botellas en un lugar fresco, seco y alejado de la luz solar directa o fuentes de calor. Estas condiciones ayudan a mantener la integridad del envase y la calidad del agua.

    • Posición de las botellas: Almacene las botellas en posición vertical para minimizar el contacto del agua con la tapa, reduciendo así el riesgo de contaminación.

    • Evite contaminantes: No almacene las botellas cerca de productos químicos, solventes o sustancias con olores fuertes, ya que el plástico es ligeramente permeable y puede absorber estos olores, afectando el sabor del agua.

    Uso y conservación después de abrir la botella

    • Consumo rápido: Una vez abierta, se recomienda consumir el agua dentro de las 24 a 48 horas siguientes para evitar la proliferación de microorganismos.

    • Refrigeración: Si no se consume de inmediato, guarde la botella en el refrigerador y asegúrese de cerrarla correctamente para mantener sus propiedades sensoriales.

    • Evite el contacto directo: No beba directamente de la botella para prevenir la introducción de bacterias. Es preferible verter el agua en un vaso limpio.

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    Consideraciones adicionales:

    • Reutilización de botellas: Aunque puede ser tentador reutilizar las botellas de plástico, se desaconseja hacerlo debido al riesgo de contaminación bacteriana y la posible liberación de compuestos del plástico con el tiempo.

    • Alternativas sostenibles: Considere el uso de botellas reutilizables de materiales como acero inoxidable o vidrio para reducir el impacto ambiental y garantizar una mayor seguridad en el consumo de agua.

    Mantenerse informado sobre las mejores prácticas de almacenamiento y consumo del agua embotellada es esencial para asegurar su calidad y nuestra salud.

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