Acheral revive tradiciones

Acheral revive tradiciones

 

Su acceso es desde la capital tucumana por la RN 38 hacia el sur. Acheral es famoso por ser el pueblo desde el cual Atahualpa Yupanqui emprendía sus cabalgatas hacia Tafí del Valle, lo que está expresado en la poesía de la canción Luna Tucumana.

Este pueblo carismático y amante de la tradición nos regala como principal atracción vivir la experiencia de esos viajes que realizaba el aclamado poeta, en cabalgatas que duran entre dos y tres días, en las que son parada obligada cada uno de los pueblos que van marcando el camino hacia Tafí del Valle, y en los que emanan las costumbres propias de la zona reflejadas en las comidas típicas y las peñas, como así también en la carismática recepción de los lugareños.

Acheral

Dentro del pueblo se puede disfrutar de una tarde placentera a la orilla de algún arroyo de aguas cristalinas  y rodeados de una frondosa vegetación.

A pocos km de Acheral podemos visitar el Museo de la Pachamama, ubicado en Amaicha del Valle, es una muestra de la geología y geografía de los valles como así también de la cultura aborígen de la zona.

Respecto al hospedaje las  localidades más cercanas como Yerba Buena, Tafí del Valle y  San javier, entre otras, cuentan con alojamiento para todo tipo de demandas. Hoteles con los servicios usuales hasta otros que ofrecen canchas de tenis, paddle, fútbol, spa con un servicio completo, gimnasio y sala de cine. Otra opción son las cabañas y estancias, una de ellas es la más antigua de la zona, surgió en la época delos jesuitas por lo que dentro de sus servicios incluye un museo en el que se puede apreciar lo referente a la historia del origen de esta  zona.

Acheral  es un buen punto de partida que invita a recrear la tradición y emprender un recorrido por los valles Calchaquíes.

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