Este pueblo pintoresco es denominado Pueblo Museo, ya que forma parte del recorrido del Corredor Internacional de las Misiones Jesuíticas. Situado en la provincia de Corrientes, a 340 km de la ciudad capital, San Carlos nos inunda en la época colonial al andar sus calles, ya que toda la ciudad está construida en ese estilo arquitectónico. Dentro de los edificios que conserva originarios de este período se encuentran el Museo de Arte Jesuítico y la Iglesia de la Misión.
Su paisaje desborda de vegetación y contrasta con el rojo de su tierra, característico de la zona. Este pueblo nos sumerge en la historia de la llegada de los jesuitas a esta tierra y su fusión con la cultura guaraní, en todos sus aspectos. En la iglesia se pueden apreciar estatuillas que son una muestra de esta mixtura. La actual iglesia de San Carlos Borromeo está constituida en el antiguo predio donde los jesuitas construyeron su templo.
Para los amantes de la arqueología dirigirse al Museo de Sitio y Centro de Documentación, será la visita obligada , ya que en estos se brinda información sobre los sitios exactos de los restos de construcciones jesuíticas, un verdadero tesoro por descubrir. Y allí mismo se pueden consultar datos bibliográficos, respecto a todo el período jesuítico, y observar piezas de cerámica y herrería creadas por los guaraníes que habitaron esa época.
En cuanto a alojamiento es posible recurrir a las localidades más cercanas al pueblo, como Santo Tomé, Posadas (Misiones), entre otras, en donde se encuentran hospedajes diversos. Este lugar es ideal para ser incorporado en un recorrido que puede abarcar distintas localidades de Corrientes, que también forman parte del Corredor Jesuítico, es un sitio que realmente merece ser visitado por su valor histórico y cultural. Visitar San Carlos es entrar en un escenario que nos hace viajar en el tiempo.
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