No caben dudas de que las empanadas son un verdadero clásico de la cocina argentina. Se caracterizan por su enorme versatilidad, ya que se pueden rellenar con los ingredientes más diversos. Algunas personas las prefieren dulces, mientras que otras optan por las saladas. Sin embargo, cabe señalar que no importa si están elaboradas con carnes, frutas, verduras o pescado, las empanadas son una verdadera delicia para cualquier paladar. Por si esto fuera poco, son realmente sencillas de hacer, por lo que no existen motivos que impidan poner manos a la obra y sorprender a tus seres queridos con este plato.
En esta ocasión en especial, brindaremos la receta de una variedad de empanadas que se distingue por su carácter autóctono. Esto es así porque están rellenas con dulce de cayote, una delicia típica del noroeste argentino (especialmente de Salta). Ideales para degustar unas empanadas diferentes que, además, son muy fáciles de preparar.
Ingredientes
Para la masa:
- 400 gramos de harina 000
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de polvo para hornear
- 70 gramos de grasa de pella
- 130 gramos de manteca
- 2 yemas
- 2 cucharadas de licor de anís
- 70 gramos de agua
Para el relleno:
- 300 gramos de dulce de cayote
- 1 cucharada de licor de anís
Para el «baño»:
- 2 claras
- 1/2 taza de azúcar impalpable
- 5 mililitros de jugo de limón
Preparación:
En primer lugar, tamizar la harina con la sal y el polvo para hornear. Formar una especie de corona y añadir en el centro de la misma la manteca, la grasa, las yemas, el agua y el anís. Mezclar muy bien todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. De ser necesario se puede agregar más agua. Una vez lista la masa, dejarla reposar envuelta en papel film. Primero se debe guardar unos minutos en la heladera y luego a temperatura ambiente.
Escurrir el dulce de cayote y calentarlo ligeramente junto al licor de anís. Dejar enfriar.
¡Llegó el momento de armar las empanadas! Tomar bollos de masa, estirarlos con un palo de amasar y colocar en el centro un poco de dulce. Pintar los bordes con agua, cerrar por la mitad y presionar con los dedos para sellar bien. Marcar con un tenedor o hacer un repulgo.
Hornear las empanadas en una placa cubierta con papel manteca, unos veinte minutos a 180º. No deben dorarse. Una vez listas, pintar con la mezcla de claras batidas a nieve, azúcar impalpable y jugo de limón. ¡El resultado es, sin dudas, delicioso!
