La vida de campo ha fomentado dentro del arte culinario una manera especial de considerar al pan y sus diferentes tipos. También es la responsable de diferentes variedades de pan que se inspiran en la materia prima típica del entorno rural. Así los panes caseros son, además de riquísimos, altamente valorados ya que todo el proceso de producción implica también un despliegue de amor que fusiona tradiciones ancestrales, placer y comunión con el entorno.
Ideal para acompañar el mate o el café con leche; solo, untado con dulces, quesos, o acompañado con un rico salame, el pan casero nos hace agua la boca.
Hoy les traemos una versión especial: pan casero con grasa trenzado
Para la preparación necesitaremos los siguientes ingredientes:
- Harina leudante 1 kg
- Aceite 6 cdas
- Grasa de vaca 6 cdas
- Agua tibia 600cc
- Sal 20 gr
- Azúcar 5 gr
Preparación:[nextpage title=»Preparación»]
Lo primero que debemos hacer es colocar todos los ingredientes secos (harina, azúcar, sal) dentro de un bol bien grande y vamos añadiendo de a poco el aceite, y la grasa de vaca tratando de incorporarlos lo mejor posible.
A continuación vamos a ir agregando de a chorritos el agua tibia, a medida que amasamos vamos a notar si falta más o menos agua. Cuando tengamos una masa lisa, suave y homogénea está lista. Ahora deberemos dividir la masa para formar bollos, debemos hacer tantos bollos como panes queremos tener, los ponemos sobre la mesada, en una placa enharinada, y los cubrimos con papel film para que leuden.
El proceso de leudado es más efectivo si se deja reposar a los bollos en un ambiente cálido. Después de diez minutos agarramos de a un bollo y estiramos la masa, luego dividimos esa masa estirada en 3 tiras que iremos trenzando. Una vez lista la trenza, colocamos nuestro pan en una placa y dejamos leudar nuevamente durante media hora o hasta que duplique su volumen. Llevamos la placa a un horno caliente y dejamos que se cocine hasta que esté bien dorado.
