El maíz es un cereal indispensable en la alimentación de cualquier latinoamericano. Es parte del origen de nuestros pueblos, ya que si nos remontamos al Popol Vuh encontraremos que el primer hombre, lejos de ser construido de barro, fue fabricado con una pasta de maíz.
Originario de México ha sabido expandirse por todo el mundo desde el siglo XVI gracias a su alta capacidad de adaptación a los diferentes suelos y climas. En la zona de Puebla se han encontrado, en excavaciones arqueológicas, restos fosilizados de maíz que datan de por lo menos diez mil años de antigüedad.
Los diversos tipos de superficie en los que se ha producido el maíz han provocado una diversificación en el tipo de grano, por eso podemos encontrar variedades de maíz de casi todos los colores, desde el blanco, pasando por el colorado, el típico amarillo, hasta el azul. Su proliferación mundial dio lugar a que sean posibles miles de derivados de este grano tan noble y nutricio. Se lo puede comer entero, desgranado, molido en forma de harina, prensado y exprimido para extraer aceite; su versatilidad sumado a la adaptación para la siembra lo convierten en un alimento de muy bajo costo, motivo por el cual, es la base de la alimentación de muchas regiones del planeta.
Hoy les traemos una receta en la que, por supuesto, empleamos maíz. Es una preparación en la que utilizaremos maíz blanco y se trata de albóndigas. Este exquisito plato contiene variedad de nutrientes y minerales, ya que con el maíz se combinarán verduras y carne, además de otro cereal, el trigo.
Ingredientes:
Para preparar 6 porciones de albóndigas de maíz vamos a necesitar los ingredientes de la lista en las cantidades detalladas:
- Carne molida ¼ kg
- Maíz blanco ½ kg
- Huevos 3
- Tomate 300 gr
- Cebolla 150 gr
- Pimiento 100 gr
- Harina de trigo, lo que necesitemos
- Aceite
- Sal y pimienta.
Preparación:
Antes de abocarnos de lleno a la preparación debemos cumplir con una serie de pasos. Es fundamental que lavemos el maíz blanco que vayamos a utilizar para después dejarlo en remojo reposado durante uno o dos días completos. El agua en la que reposen los maíces deberá ser cambiada cada tanto.
Una vez cumplido el plazo del remojo de los granos, vamos a proceder a tirar el agua y volver a lavarlos. Los llevamos a un mortero y empezaremos a molerlos allí, hasta que queden bien rotos en pequeños trozos, irá tomando de a poco una consistencia cremosa.
Vamos a buscar una fuente y en ella pondremos el maíz hecho crema, los tres huevos y la carne. Salpimentamos. Mezclamos bien hasta incorporar todo. Tendremos como resultado una mezcla que puede que esté muy chirle, en este caso vamos a incorporarle la harina de trigo para que de esta forma contrarrestar el exceso de agua. A continuación vamos a formar bolitas con nuestra masa de maíz y carne, las iremos colocando en una bandeja o superficie enharinada.
En una olla amplia vamos a poner agua. La llevamos al fuego y esperamos que rompa hervor. Cuando esto haya ocurrido introduciremos las albóndigas de maíz y dejamos que se cocinen durante 15 minutos. Transcurrido el lapso indicado, retiramos las albóndigas del agua con una espumadera. Reservamos las albóndigas cocidas y el agua de la cocción.
Salsa para acompañar
Aparte vamos a preparar una salsa para acompañar a las albóndigas. Vamos a picar la cebolla en cubos pequeños, luego la vamos a dorar en una sartén con un generoso chorro de aceite. Añadimos el pimiento también picado en cubitos. Y cuando pimiento y cebolla estén ya a cocidos agregar el tomate también en cubos. Dejamos cocinar durante unos minutos más para que se fusionen los sabores a fuego bajo. Cuando la salsa esté lista la vamos a volcar en el caldo de cocción de las albóndigas que antes reservamos y llevamos al fuego por unos minutos más. Para ir finalizando incorporamos las albóndigas. Con el fuego al mínimo vamos a permitir que se cocine hasta que la preparación espese un poco. Retiramos del fuego y servimos caliente.
Esperamos que les gusten estas deliciosas albóndigas de maíz, cuenten cómo les quedaron en los comentarios de esta entrada ¡Hasta la próxima!
