Polenta a la tabla, es sin duda alguna un legado familiar. Una tradicional y magistral receta de la abuela, para los que pudieron disfrutarla es toda una ceremonia familiar rodear la mesa con la tabla de polenta en el centro. Una excelente excusa para reunir a la familia y amigos y degustar de este exquisito plato que permanece a través del tiempo.
A continuación vamos a ver una sabrosa receta para elaborar en casa y esperar una ocasión especial para compartir en familia, veremos los ingredientes que vamos a necesitar y el paso a paso de toda su elaboración:
Ingredientes: (10 comensales)
- 1 kg. de Harina de maíz
- 1 litro de Leche
- 3 litros de Agua
- Sal
- Salsa de tomate
- Carne vacuna, salchicha parrillera y/o chorizo a gusto
- Condimentos a gusto
- c/n de Queso rallado
Preparación:
- En una olla amplia se pone a hervir unos 2 litros de agua y en otro recipiente una cantidad similar de agua, para tener como reserva e ir agregando según la necesidad.
- Cuando el agua ya este hirviendo se va agregando de a poco la harina de maíz, se espolvorea y con una espátula o cuchara de madera se remueve para evitar que se formen grumos.
- A medida que se va espesando se le añade agua o leche, de manera tal que no se espese demasiado.
- Recordemos que siempre esta cocción es a fuego suave y bajo, puede durar aproximadamente 1 hora sin interrupción.
Como se sirve:
- Se puede utilizar una tabla sin pintura ni lustre o bien una mesa, luego se vuelca la polenta sobre la tabla y se distribuye en toda su extensión.
- Paso siguiente, se vierte la salsa de tomate con el estofado que elegimos sea carne o chorizo o ambos, de manera pareja sobre la polenta.
- Luego los comensales se distribuyen alrededor de la mesa y cada uno con su tenedor se va sirviendo bocados de afuera hacia al centro.
- Algo muy interesante es que está prohibido llegar a comer la carne o el chorizo, sin comer primero la polenta que lo antecede.
La polenta es un clásico y sabroso plato que desde chicos hemos probado la mayoría de nosotros, sin embargo la variante de probar la Polenta a la Tabla es aún mejor. Una vez lista la polenta como vimos anteriormente se esparce una capa fina de 1 a 2 centímetros sobre la tabla, se le agrega la salsa y luego se espolvorea el queso rallado que se fundirá con el calor de la polenta.
Al cabo de unos minutos se endurecerá un poco la polenta, lo cual nos permitirá servirnos los bocados en pequeños cuadraditos y degustar estos deliciosos sabores con la mejor compañía, la familia.
Imagen: mamayasecocinar.com
