Si con frecuencia se te antoja un buen licor y también te das maña cuando tenés que desenvolverte en la cocina, no hay excusas que te impidan elaborar esta bebida alcohólica por tu cuenta. Es imposible negar la enorme diferencia que existe entre un producto comprado y uno que se realiza de forma casera. El licor no es la excepción a la regla, razón por la cual en este caso en particular ofreceremos una receta simple para preparar una de sus tantas variedades: el de leche.
El licor de leche es una opción realmente interesante para quienes gustan de preparar este tipo de bebidas en la comodidad de sus hogares. Esto es así porque se trata de una consumición que no necesita ser macerada demasiados días, sin dejar de lado que el proceso de elaboración es más bien sencillo. Por si esto fuera poco, el resultado de esta receta es exquisito: una bebida suave, dulce y cremosa que rescata el auténtico sabor argentino.
Ingredientes:
- 1 litro de leche
- 1/2 kilogramo de azúcar
- 1 barra de vainilla
- 1 limón
- 1/2 litro de alcohol etílico
- 1 cucharada de glicerina
Preparación:
Antes de poner manos a la obra para elaborar tu licor de leche, es necesario que encuentres un recipiente adecuado para disponer la preparación una vez que esté lista. Lo ideal es que sea de vidrio y pueda ser cerrado herméticamente. Antes de utilizarlo, es importante lavarlo muy bien con agua hervida (con el objetivo de eliminar cualquier tipo de bacteria).
¡Ya llegó el momento de elaborar el licor! Primero hay que hervir la leche junto con el azúcar. Una vez que esta mezcla hierva, dejar enfriar cerca de diez minutos. Después, disponer en el recipiente junto con el alcohol etílico.
Cortar la barra de vainilla en pequeños trozos. Repetir este procedimiento con el limón. Incorporar ambos ingredientes en el recipiente. Dejar la mezcla allí un total de dos semanas, en las que deberás mover ligeramente el frasco todos los días para que los sabores se fusionen.
Una vez que pasen los quince días, filtrar la mezcla dos veces con un papel filtro. Por último, añadir la glicerina para que el licor espese. Sólo resta pasarlo a una botella de vidrio y disfrutar de su exquisito sabor.
